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Mostrando las entradas etiquetadas como Naturaleza

El vuelo estrellado de la mantis

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Recuerdo que una vez, en la facultad, me dijo un compañero que lo que más le sorprendía de mí era mi capacidad para ser feliz con una mantis y unas cuantas canciones (aún no escribía novelas). No sé hasta que punto eso era o sigue siendo cierto. Tampoco pienso que deba hacerme sentir orgulloso, ni me creo mejor que los del "Todos somos insaciables". Lo que sí tengo claro es que, a día de hoy, podría pasarme horas observando a este y a otros insectos. Porque, parafraseando a Whitman, son perfectos y no menos importantes que el camino que recorren las estrellas. Y eso no es poco. Disfrutemos del vídeo, amigos.

Libélula en el P.N. Montes de Málaga

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Como un destello, como un disparo, como vuelan los arrepentimientos del poema de Benedetti. Demasiado rápido para nuestros ojos de ciudad, acostumbrados a la rutinaria facilidad de lo evidente. Así apareció esta libélula, oculta por su propia vorágine entre las grises espigas del matorral. En uno de estos momentos en los que para uno se paraliza el mundo, trata de imitar la levedad del mimo y desea que fuese para siempre ese suspiro en medio de la cotidianidad del bosque. Estos insectos son fascinantes: su vuelo, su colorido, sus ojos, su elegancia... Siempre he visto en ellos algo hipnótico. Aunque suelen ser animales de agua dulce, este ejemplar estaba a kilómetros del riachuelo más ceracno. La naturaleza siempre se empeña en rompernos los clichés. Siempre hay algúna excepción que desconocíamos, alguna familia adaptada a otras condiciones diferentes a la del resto. Quizás en eso consista la vida. En fin.  Al final la fugacidad no lo fue tanto, se hizo la magia y esa explosión d

Reflexiones sobre el Paraje Natural de los acantilados de Maro-Cerro gordo. II

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A veces, da la sensación de que la propia naturaleza te guía hacia lugares que han permanecido ignorados u ocultos a aquellos que no hablan su idioma. Y de que para ello se sirve de personas, situaciones, coincidencias, aparecidas hábilmente en el camino. Este pequeño paraíso de roca y agua con musgos, líquenes, helechos y todo tipo de insectos se encuentra muy cerca del Paraje Natural de los acantilados de Maro-Cerro gordo. A unos pasos del abrupto y áspero monte mediterráne o sobre el que reina un sol sin piedad, como el recuerdo de un pasado lluvioso que la tierra guardase en el cajón de una de sus cicatrices, como el sueño de aquello que pudo ser y que quizás ya no será. No aparece en ninguna guía turística, ni en ningún folleto de la Junta y la persona que nos lo indicó parecía en cierto modo feliz con ello. Lo entiendo. Sería una pena que fuese descubierto por aquellos que vociferan a lo “Sálvame”, los de la jauría de vehículos con ladrido metálico o... Bueno, los que quieren est

Reflexiones sobre el Paraje Natural de los acantilados de Maro-Cerro Gordo I

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El Paraje Natural de los acantilados de Maro-Cerro Gordo es una isla de biodiversidad bañada por dos mares: El de Alborán y el de plástico. Valoramos poco las cosas cuando las tenemos, y no es muy aventurado pensar que si no se hubiese conseguido proteger este magnífico enclave, que además de Paraje Natural es Zona de Especial Protección para las Aves y Zona Especialmente Protegida de Importancia para el Mediterráneo, hubiese sido engullido por los cultivos hasta desaparecer.  Lo mismo que ocurrió con otras zonas no menos interesantes de nuestro litoral con el ladrillo y el boom turístico descontrolado.  Las cosas no se consiguen solas y es justo decir que es gracias a biólogos, técnicos, asociaciones y, en este caso, a las administraciones correspondientes, que tenemos en apenas 12 Km2 bosques de encinas, abrupto matorral mediterráneo, especies de regiones más húmedas como el boj, aves como la lavandera o el halcón peregrino, reptiles amenazados como el camaleón, nuestros últimos en

Un año de "El armador"

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"Alguien me dijo hace tiempo,  que hay calma antes de la tormenta.  Lo sé. Ha sido así desde hace tiempo.  Cuando se acaba, entonces dicen, llueve en un día soleado. Lo sé.  Brillante como el  agua...   Quiero saber si alguna vez has visto la lluvia... Quiero saber si alguna vez has visto la lluvia... Cayendo en un día soleado. Ayer y en días anteriores,  el sol era frío y la lluvia fuerte. Lo sé,  Ha sido así todo mi tiempo,  por siempre. Da una vuelta en círculo,  rápido y lento. Lo sé, no me puedo detener y pregunto...  Quiero saber si alguna vez has visto la lluvia...  Quiero saber si alguna vez has visto la lluvia...  Cayendo en un día soleado.  ¡Si! Quiero saber si alguna vez has visto la lluvia...  Quiero saber si alguna vez has visto la lluvia...  Cayendo en un día soleado." " Have you ever seen the rain? " John Fogerty  ( Creedence Clearwater Revival ). 1.970. Es lo que disfrutamos hace un par de días en Málaga. La lluvia en un día soleado, caye

Audios de "Málaga al día" en 2013.

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Amigos, os dejo un enlace de la plataforma Spreaker en el que podréis encontrar los audios de esta temporada de "Málaga al día" desde Septiembre hasta Noviembre del pasado año. También dos selecciones muy divertidas con los mejores momentos. Recordad que os esperamos todos los miércoles a las 11:20 en Onda Azul Málaga con Celia Bermejo y Antonio Ismael en www.ondaazulmalaga.es/radio y en el 97.4 de la FM de Málaga con toda la actualidad de naturaleza y medio ambiente.

Consejos para una navidad sostenible II

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La pasada semana hablábamos en “Málaga al día” de consejos para pasar una navidad sostenible. Nos centrábamos sobre todo en no arrancar plantas ni árboles de sus hábitats, en ir reduciendo cada vez más la presencia del plástico y hoy vamos a ocuparnos de los animales. Porque la asociación ecologista WWF ha lanzado la campaña “#No son juguetes” para concienciar a la ciudadanía sobre la responsabilidad que supone adquirir una mascota. Un fenómeno bastante peligroso que se está dando en internet es la venta ilegal de especies exóticas. Las especies invasoras son una de las principales causas de degradación de los ecosistemas. Las especies nativas, al no haber evolucionado en contacto con estas nuevas especies, no pueden competir con ellas, por lo que son desplazadas creando problemas gigantescos, desequilibrios en estos ecosistemas e incluso grandes pérdidas económicas e incluso problemas para la salud pues no sabemos qué clase de microorganismos pueden

Bosques marinos: guarderías de la biodiversidad.

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Del 9 al 10 de octubre, tuvimos la oportunidad de asistir en Málaga a las II Jornadas Técnicas sobre Praderas marinas organizadas por la UICN en las que más de 100 participantes, entre científicos, gestores y representantes municipales, debatieron sobre el estado de conservación, puesta en valor y gestión de las praderas marinas en el litoral español y en el Mediterráneo. Esta acción se encontraba dentro de las actividades del proyecto europeo LIFE+POSIDONIA Andalucía. Lo comentaba en el pasado programa de Málaga al Día, de Onda Azul RTV Málaga , el nivel demostrado por los ponentes me ha parecido excelente, incluso intervenciones de simples asistentes han tenido gran calidad. A tantos que lo ven todo negativo les hubiera venido bien un paseo por las instalaciones del Edificio de Estudios Portuarios para conocer de primera mano la categoría de muchos de nuestros investigadores, que han sobrevivido además a todo tipo de recortes y obstáculos en estos últimos años. El problem

El Río de la Miel (Algeciras)

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¿Qué pensaríamos si nos hablan de zonas de vegetación que han permanecido intactas desde el Terciario? ¿De bosques de galería húmedos y umbríos que han desaparecido de la práctica totalidad del continente europeo? ¿De gargantas angostas en las que sorprendernos con un paraíso de musgos, líquenes, helechos y arbustos relictos como el Rododendro? Seguramente la imaginación del lector volaría rápido hacia los bosques de regiones tropicales, a las grandes selvas, quizás, lejanas e inexploradas por el hombre blanco. Pues no, todas esas maravillas están tan cerca de nuestra civilización que desde la localidad de Algeciras apenas 20 minutos en bus (sigamos desmontando el mito de que para ir al campo, para ver campo, hacen falta enormes vehículos 4x4) nos separan de ellas. Son sólo algunos de los elementos de la naturaleza que podemos disfrutar en el Parque Natural de los Alcornocales y más concretamente en la Ruta del Río de la Miel. Tenemos que empezar en la Barriada del Cobre (Nos

La alegría de tener cerca Los Montes de Málaga.

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Es curioso, muchas veces nos acostumbramos a vivir rodeados de auténticas joyas que no siempre valoramos y pensamos que siempre han estado ahí. Recuerdo como una vez, ante una vieja fotografía de principios del siglo XX, a alguien le sorpre ndió ver lo que hoy es esa masa verde, ese pulmón de pinos que nos da tanta vida y oxigeno como una tierra yerma, seca, sin vegetación. Fue tan sólo en 1.930 cuando se llevaron a cabo las reforestaciones con pino carrasco para hacer frente a las continuas inundaciones que sufría la ciudad tras las talas que se llevaron a cabo después de la reconquista. Es decir, anteayer. Nuestros abuelos no conocieron quizás de niños ese paraíso para los sentidos que tenemos tan cerca, con esas verdes y vigorosas copas de pinos, encinas, alcornoques, moviéndose a la par que el viento, sobrevoladas por elegantes rapaces, por el águila calzada, por la culebrera, transitadas con cariño, sin hacer ruido, sin llamar la atención por un re

Los cahorros de Monachil

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Nunca dejaré de repetir la enorme maravilla que es el paisaje natural de Andalucía. Pocos lugares te permiten disfrutar de un contraste tan fascinante como el de nuestras tierras del sur, en pocos lugares puedes dar un salto en cuestión de minutos desde enclaves áridos, secos y agrestes, desde las zonas rocosas que son feudo del matorral mediterráneo o desde las dedicadas a ancestrales cultivos hasta los más bellos rincones de umbría, de frescor, de vegetación de ribera, donde el espíritu del agua besa de forma mágica la cansada piel del naturalista. Un ejemplo de esto  es la ruta de Los cahorros por la Era del Portachuelo, más conocida por la de los cahorros del Río Monachil o también por sus célebres puentes colgantes. Ruta que comienza en el mismo pueblo, bordeando el río por la Calle Trinidad Carreras. Es increíble la era Portachuelos, en ella aún puede oírse la voz rota de un pasado de secano, con cultivos de trigo o de cebada, cereales que lo fueron todo