Puerto de Mô
“Barco varado en el arenal Que lame el mar de retirada. Escondite de vientos furtivos. Refugio de velas cansadas”. Con versos como estos rendía homenaje Joan Manuel Serrat al puerto de Maó/Mahón en el sencillo que daba título a su álbum de 2006 Mô (pronunciación local del nombre de la histórica ciudad menorquina). Pienso que no le faltaban motivos al catalán, porque se trata del mayor puerto natural del Mediterráneo, con casi 6 Km, y del segundo más profundo del mundo, alcanzando los 30 m. Pero no solo por eso. En pocos lugares, personalmente, he percibido tantas sensaciones relacionadas con lo que fue, con lo que es, con las vidas de su gente. Pocas veces el mar te habla tan claro de sus inviernos, de las olas que rompen frente a los muros del tiempo, de viejas historias de dramas y naufragios, de los marineros que, como dijo Manuel Vicent, navegan con la luna sus trampas. Y comienzas a intuir todo eso, cuando llegas temprano, en los profundos silencios, en el llegar tranquil...